
Introducción
Ximena Vázquez, Ana María Fernández, Amanecer Aldama, Rocío Rebollo, Sigfredo Corral, Sebastián Vera y Luis Alonso Aznar, integrantes de la Clínica en Derecho y Política Pública del ITAM, presentamos esta publicación como parte de un proyecto colaborativo con Abogadas MX. Agradecemos la orientación y el apoyo de Antonia Rodríguez, Melyssa Alvarado y Ana María Zorrilla en la elaboración de este proyecto. Asimismo, agradecemos la indispensable asesoría de las personas especialistas que nos han orientado: Melissa Ayala, Edna Guzmán, Mauricio Madrigal, Fátima Masse y Raúl Fernández Briseño. Este texto presenta la segunda parte del proyecto y revela la opinión de los autores y no debe interpretarse como un posicionamiento oficial o particular de institución alguna.
Con base en los Principios para el Empoderamiento de las Mujeres publicados por ONU Mujeres, el objetivo de este artículo es hacer un breve recuento de las prácticas laborales identificadas en despachos, clínicas y otros ámbitos laborales jurídicos, tanto colombianos como estadounidenses. En este sentido, para efectos de este artículo entendemos como “buenas prácticas laborales” al conjunto coherente de acciones que efectivamente cumplen con uno o más de los referidos principios de manera integral y que han arrojado resultados positivos y demostrado su eficacia en un determinado contexto, por lo que se espera que en contextos similares tengan efectos parecidos. En esta entrada del blog desarrollamos los principios 3, 4 y 5.
I.Buenas prácticas para “velar por la salud, la seguridad y el bienestar de todos los trabajadores y trabajadoras”
Sobre este principio, en EE. UU. la Comisión de Programas de Asistencia a Abogados de la ABA desarrolló el Lawyer Assistance Programs (LAPs), mediante el cual a lo largo del país se prestan servicios de ayuda profesional para jueces, abogados y estudiantes de la carrera de derecho que se enfrentan a problemas de abuso de sustancias o de salud mental. De esta manera, este programa pretende ayudar a todas las personas que participan de la profesión jurídica dentro del país ―sin distinción de género― e incluye acciones para atender problemas como ansiedad, depresión, pánico, distanciamiento social, salud mental, estrés, uso de sustancias y suicidio, entre otros.
La ABA ―mediante esta misma comisión― creó la “Well-Being Campaign” con la que pretende “mejorar el panorama del uso de sustancias y la salud mental de la profesión legal, con énfasis en ayudar a los empleadores legales a apoyar un ambiente de trabajo saludable.” Intenta extender este compromiso a través de bufetes de abogados, entidades corporativas, agencias gubernamentales y organizaciones de asistencia legal.
II.Buenas prácticas para “promover la educación, la formación y el desarrollo profesional de las mujeres”
En EE.UU. encontramos el “40:40:20 aspirational gender diversity target” que se ha implementado en empresas y despachos jurídicos con el fin de que el número de personas empleadas esté en un radio de 40:40:20. Es decir, que 40% del personal sean mujeres, 40% hombres y 20% géneros diversos. Baker Makenzie tiene como meta de implementación total el día 1° de julio de 2025.
Como resalta Constanze Ulmer-Eilfort (Presidenta del Comité Global de Diversidad e Inclusión de Baker McKenzie), políticas de este tipo son punta de lanza dentro del sector jurídico para propiciar que la reserva de talento que trabaja en el despacho pueda desarrollar su potencial al máximo. Como lo plantea Jaime Trujillo (Presidente Global Interino de Baker McKenzie), el despacho ha logrado tener “[…]más socias femeninas que cualquier otro bufete de abogados y durante los últimos tres años nuestras promociones a socio han sido en promedio un 40% de mujeres. Varios de nuestros equipos de liderazgo de grupos industriales tienen al menos un 50% de mujeres.” Así, esta política se implementará en las sedes que la firma tiene alrededor del mundo.
Otra buena práctica es el desarrollo interno de programas para la contratación, la retención y el avance de las abogadas dentro de los despachos. Esto procura mantener un entorno positivo de trabajo, así como el apoyo integral para las abogadas. Despachos como Holland & Knight han desarrollado programas como “Rising Stars” con el que pretenden mejorar las oportunidades profesionales tanto dentro como fuera de la firma para mujeres abogadas, y alentarlas a ser líderes activas en sus comunidades.
III.Buenas prácticas para “llevar a cabo prácticas de desarrollo empresarial, cadena de suministro y marketing a favor del empoderamiento de las mujeres”.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) propone para el desarrollo empresarial establecer como objetivo alcanzar cinco acciones. La primera es la Promoción del liderazgo femenino que incluye el objetivo de incrementar el número de mujeres con puestos gerenciales y define la meta en un 43% de los puestos. Programas como el “Programa de mujeres líderes emergentes” son un buen ejemplo para apoyar mediante prácticas de imparcialidad y transparencia en la elección de candidatos para los puestos gerenciales.”
Este Programa se divide en varias secciones. Una de estas tiene como objetivo lograr que los gobiernos fortalezcan las buenas prácticas para que las mujeres candidatas a puestos públicos tengan las herramientas para acceder a ellos y que se sientan empoderadas para competir contra los hombres en este sector. Este Programa ya fue implementado en diversos países como República Dominicana, Panamá y Argentina.
El Programa se relaciona directamente con el siguiente principio; su finalidad es abrir el campo de los negocios y de las relaciones de empresa, tanto en el sector público como en el privado, a las mujeres. Así, el BID logra que las mujeres en latinoamérica tengan un acceso imparcial y transparente a este sector, pudiendo ocupar los puestos más altos sin importar los prejuicios y el machismo que permea en el mismo.
Referencias:
7.ONU.Principios para el Empoderamiento de las Mujeres. La igualdad es buen Negocio. (2011). En línea: https://www2.unwomen.org/-/media/field%20office%20mexico/documentos/publicaciones/2011/principios%20de%20empoderamiento/7principiosempoderamiento%20pdf.pdf?la=es
8.American Bar Association. Mental Health Resources. S.a. En línea: https://www.americanbar.org/groups/lawyer_assistance/resources/covid-19–mental-health-resources/
9.Traducción propia. American Bar Association. Well-Being in the Legal Profession. (2021). En línea: https://www.americanbar.org/groups/lawyer_assistance/well-being-in-the-legal-profession/
10.Traducción propia. Baker McKenzie. Baker McKenzie First Global Law Firm to Set 40:40:20 Gender Targets. (2019). En línea: https://www.bakermckenzie.com/en/newsroom/2019/06/gender-targets
11.Idem
12.Holland & Knight. Women´s Initiative. S.a. En línea: https://www.hklaw.com/en/firm/firm-culture/womens-initiative
13.Daley, S. BID Mejorando vidas. (2017).En línea: https://blogs.iadb.org/igualdad/es/5-formas-de-promover-la-igualdad-de-genero-en-una-organizacion-internacional/
14.Red Prolid. Programas para mujeres líderes emergentes del sector público. En línea: https://redprolid.org/programa/
