Mi nombre es Sofía Gómez Bautista, algunas de ustedes me conocen, y otras no. Sin embargo, lo importante es que, yo a ustedes si las conozco, desde el 2015, cuando se fundó Abogadas Mx.
Recuerdo la primera vez, que las vi a lo lejos, interactuando entre sí, en el Taller Anual 2015 en el German Center en Santa Fe.
A lo largo de los años, he tenido el gusto de interactuar con algunas de ustedes, e incluso, sin ustedes saberlo, han sido mis mentoras.
A manera de introducción, nací en Toluca, y desde hace 16 años resido en la Ciudad de México. Vengo de una familia en la que solo hay contadores y administradores de empresa. Actualmente soy socia de la Práctica Laboral de un despacho multidisciplinario.
El motivo de este testimonio de vida es simplemente para hacerlas sentir “especial” y agradecerles por su incasable labor social en favor de tantas mujeres que han decidido dedicarse a la abogacía mexicana, incluyéndome.
Me alegra tanto que se me haya presentado esta oportunidad para compartirles y expresarles lo que desde hace mucho tiempo he pensado y sentido respecto de ustedes.
Siempre he dicho y reconocido públicamente que, sin el apoyo, herramientas, talleres, seminarios, y red de networking que promueve Abogadas MX, yo no sería la mujer abogada en la que me he convertido. En ese sentido, me gustaría compartirles y decirles el porqué de esto.
Sin duda, duda no ha sido una labor fácil, sin embargo, deben estar seguras y sentirse muy orgullosas de sí mismas, de lo bien que lo han hecho, y prueba de ello, es lo siguiente que les voy a contar:
Uno de los mayores obstáculos a los que me he enfrentado a lo largo de mi carrera profesional fue carecer de un mentor o modelo a seguir en mi círculo familiar cercano, por ello, me he vi en la necesidad de formar mi propio “role-model” a seguir, y experimentar que, es lo que me funciona y que no.
Cuando Abogadas MX se fundó en 2015, me convertí en miembro, y desde ese entonces a la fecha, he admirado, aprendido, y seguido silenciosamente, a la gran mayoría de las consejeras fundadoras, quienes me han contribuido a la formación de mi role-model. Quiero que sepan, que llevó dentro de mí, un grano de arena que las representa.
Debo confesarles que, soy su fiel admiradora y las felicito por su tan distinguida carrera profesional. Las sigo en redes sociales, y estoy siempre pendiente de su carrera profesional, incluso, con algunas de ustedes, hasta tengo la fortuna de llamarlas amigas.
Seguirles los pasos ha sido mi mayor fuente de inspiración y motivación para alcanzar mis sueños y trazar nuevos retos.
Escucharlas compartir sus experiencias profesionales y de vida, me han permitido: ver la vida con un enfoque diferente, resolver dudas e inseguridades; solucionar problemas a los que en ese entonces me enfrentaba; me han ayudado a identificar y enfocarme en mis fortalezas y habilidades; les he copiado y puesto en práctica muchas de sus estrategias y consejos, los cuales en muchas ocasiones me han funcionado para alcanzar un objetivo; me han guiado cuando me he encontrado desorientada e indecisa respecto a los siguientes pasos a seguir en mi carrera profesional; incluso platicar con ustedes me ha empoderado y revitalizado para tomar decisiones difíciles para continuar creciendo profesionalmente.
Por ello, a manera muy resumida, me gustaría compartirles lo que más admiró y he adoptado de ustedes como parte de mi ser, así como, la forma en que han impactado y contribuido en mi vida.
De Valeria Chapa, su gran inteligencia, misterio y capacidad para ser el agente de cambio que muchas veces se requiere para romper paradigmas, patrones y/o estereotipos. Siempre le estaré eternamente agradecida por haber fundado Abogadas MX, un parteaguas en la abogacía mexicana.
De Tere Paillés, su fortaleza y resiliencia para enfrentar los retos que nos pone la vida. Después de escuchar su historia personal, considero que no hay obstáculo que no podamos vencer, siempre habrá una manera de hacerle frente a las circunstancias y resolverlas. Cómo dicen “lo único que no tiene solución, es la muerte”.
De Denise Guillen, me inspira su carácter aguerrido, personalidad imponente, y confianza. En mi opinión, Denisse ha roto estereotipos en la abogacía mexicana, en el sentido de que me ha enseñado que, no se tiene que ser la abogada tradicional para lograr el éxito profesional, al contrario, puedes ser fiel a tus pensamientos e ideología y ser una abogada exitosa vistiendo a la moda.
De Caro Machado, he aprendido a sonreírle a la vida y afrontarla con valentía. No conozco proyecto de vida o profesional que por más desafiante que sea, Caro no lo haya tomado por los cuernos, domado, y salido avante. A mi querida Caro Machado, no me quedan más que palabras de agradecimiento, porque sin tener que hacerlo, fue y sigue siendo una gran mentora para mí, quien me ha regalado incondicionalmente su valioso tiempo para platicar acerca de mi desarrollo profesional y de vida.
De Mariel Cabañas, su inigualable sonrisa y carisma. Recuerdo la primera vez que, interactué con ella, en el seminario organizado en un hotel de avenida Reforma. Ahí tuve la suerte de sentarme a su lado izquierdo, y participar en la dinámica de grupo. Ella, fue la primera en romper el hielo, inspirando confianza entre todas las asistentes, para posteriormente interactuar y aprovechar al máximo la dinámica de grupo.
De Tatiana Escribano, su valor y capacidad para tomar riesgos, porque no obstante haber llegado al punto más alto de su carrera profesional en un despacho global altamente reconocido, decidió apostarle a su proyecto personal, y fundar su propio despacho.
De Romina López, la extraordinaria capacidad y resiliencia que puede llegar tener una mujer, no solo porque habla 4 idiomas sino porque ha roto paradigmas en el sector financiero y bancario, además de que, no sé de dónde saca tanta energía para desempeñar su trabajo y volar constantemente de Mexico a Argentina y viceversa para cumplir su rol de familia y compromisos profesionales.
De Vanessa Franyutti, admiro todo lo que ella representa, esto es, ser socia de un despacho top ten en México, además de su constancia, tenacidad, y perseverancia para romper un claro techo de cristal en los despachos mexicanos. No me imagino los retos, por no decir, los obstáculos que tuvo que librar para consolidarse como mujer abogada en un mundo dominado por hombres.
De Bertha Ordaz, la conocí fuera de Abogadas MX, por una entrevista que le hizo un muy buen amigo en común, y la cual además de disfrutarla, me impactó el gran consejo que compartió, esto es, la capacidad y poder interno que debemos fomentar en nosotras mismas para decidir cómo reaccionar y responder ante las dificultades que se te presentan, así como, la importancia de fortalecer nuestra confianza a través de enfocarnos en nuestras fortalezas
En fin, estás son solo algunas de las cualidades que admiró de ustedes y que he puesto en práctica a lo largo de estos años, las cuales han resultado fructíferas para desarrollarme exitosamente.
Nuevamente les agradezco con el corazón, la labor que continúan haciendo, y les aseguró que, en el ámbito que a mí respecta, lucharé para promover la igualdad de género, la diversidad e inclusión dentro de la abogacía mexicana, siempre fomentando la sororidad y desarrollo profesional de nuestras abogadas futuras.
Finalmente, no puedo omitir dejar de agradecerle a Cynthia de Uriarte, quien fue mi primera mentora y parteaguas en mi carrera, cuando era pasante y después como abogada de primer y segundo año; así como Antonia Rodríguez que, sin mucho tiempo de conocerme, me extendió la mano para participar en la segunda edición de los Estándares para la Diversidad e Inclusión en los Despachos Jurídicos
Les deseo unas felices fiestas decembrinas, y que el 2024, les recompense todo lo que nos han regalado incondicionalmente. Les mando un fuerte abrazo y beso con mucho cariño.
Sofía.